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Cada vez somos más conscientes de la escasez de agua en el planeta y los graves efectos que puede tener en nuestro futuro.

Todavía sigue habiendo una parte importante de la población mundial que no tiene acceso a agua potable, en concreto más de 2.200 millones de personas. Este es un problema humanitario, pero no se queda solo aquí.

La producción industrial, la agricultura o la industria alimentaria son dos de los sectores que más agua utilizan para llevar a cabo su actividad, pero son sectores esenciales para nuestro día a día.

El agua es un recurso muy escaso, que muchas veces lo valoramos poco porque estamos acostumbrados a que esté siempre disponible, pero es fundamental no sólo para la vida sino para el desarrollo económico.

Hemos visto proyectos muy potentes que ponen su grano de arena para mejorar el abastecimiento de agua o utilizar el agua de una manera más eficiente en su producción utilizando tecnología o controles más rigurosos.

Un gran ejemplo de esto es la empresa española Auara, y su modelo de embotellamiento de agua solidaria, lo que les permite apoyar el desarrollo de proyectos de acceso a agua potable en zonas donde el abastecimiento de agua es difícil.

Entendiendo la necesidad que tenemos de agua y las dificultades que implica conseguirla tiene sentido que pueda ser una inversión muy rentable.

¿Qué significa invertir en agua? ¿Comprar acciones de agua?

Hay varias formas de invertir en agua, pero la que más nos gusta tanto por rentabilidad como por el impacto que genera en el planeta es hacerlo a través de empresas que mejoran alguna de las situaciones que hemos comentado.

Los gobiernos de los países tiene poco margen de actuación para mantener el suministro de agua potable o agua para producción por tener unos sistemas anticuados y extremadamente caros de renovar, aquí aparece una oportunidad para las empresas privadas.

Nuestra función desde Micappital ECO es encontrar productos que busquen ese tipo de empresas que van a permitir revalorizar nuestra inversión a la vez que luchan por mejorar el abastecimiento y calidad del agua del planeta.

Dentro del sector del agua nos fijamos mucho en empresas que sean capaces de desarrollar tecnología hídrica, como sistemas de depuración y filtración, equipos de control del suministro que mejoren la eficiencia de la distribución de agua, y sistemas que eviten fugas y despilfarro.

En cada industria, que utiliza agua para su producción, hay muchas oportunidades de reducir el consumo de agua y evitar desperdicios, lo que convierte a las empresas productoras en más eficientes, más sostenibles y más responsables con el planeta.

Por último otro de los sectores dónde podemos encontrar grandes oportunidades es en la gestión de residuos, dónde se produce la gran mayoría de la contaminación del agua.

Este problema es el responsable del desperdicio de agua y su contaminación en las grandes ciudades, pero pone de manifiesto una gran oportunidad para las empresas que sean capaces de innovar y proponer soluciones para reducir esa contaminación.

Solidaridad + Rentabilidad

La inversión de impacto y sostenible nos permite buscar este tipo de combinaciones, rentabilidad y solidaridad con el planeta.

El agua es uno de los objetivos de desarrollo sostenible fijados por la ONU para 2030.

Poder invertir en todas estás empresas que están cambiando el futuro del consumo y la utilización del agua es una alternativa muy interesante para una cartera bien diversificada y supervisada.

Es una inversión con un impacto positivo en el planeta muy significativo y con una rentabilidad a largo plazo que puede ser muy interesante.

Esta es una razón más para no tener el dinero parado en la cuenta corriente mientras no lo estás usando.

Siempre hay que hacerlo de forma profesional y responsable, y recomendamos que siempre sea de forma diversificada y en productos líquidos, para que cuando necesites ese dinero puedas disponer de el sin ninguna penalización.

La inversión en agua es una de las temáticas sobre las que asesoramos desde Micappital ECO, apoyando los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU a la vez que busca generar rentabilidad.